Reclamo formal a zoológico Metropolitano

¿Cuánto cambiaría nuestra realidad si dejásemos de naturalizar prácticas impuestas por el afán científico, por la tradición o por la simple curiosidad hacia nuestros hermanos animales? Una vez escuché un argumento para validar el cautiverio animal en los zoológicos, este fue que “los animales de los zoológicos no sobrevivirían en su hábitat natural”. Extraño razonamiento si pensamos que los zoológicos no han existido desde siempre. De hecho los primeros zoológicos pertenecieron en su mayoría a reyes que quisieron jactarse de su exquisita colección de animales exóticos.

Sabemos que hoy algunos zoológicos se proponen rescatar, sanar y proteger animales heridos, maltratados o vendidos ilegalmente, sin embargo, ¿qué relación tiene esto con el carácter recreativo que se le confiere a la visita al zoológico, a la entrada que pagamos o al evidente maltrato que sufren las distintas especies animales por la falta de condiciones esenciales?

Hemos querido plantearnos estas reflexiones para aplaudir la acción de Josefina Troncoso y Rocío Martínez, de tercero medio, quienes pusieron un reclamo formal en el Zoológico Metropolitano al darse cuenta del deplorable estado de nuestros hermanos menores, los animales. Creemos que así se hace verbo el verdadero espíritu Farmland.

¡Gracias Josefina y Rocío!